miércoles, 7 de mayo de 2008

Se ha perdido una batalla, no la guerra

Lo último que nunca se puede perder es la fe y la esperanza. No vale la pena seguir pensando en la agonía que supuso la derrota en Bellreguard, seguir con la tortura no sirve para nada porque por desgracia no podemos volver atrás. Hay que levantar la cabeza y mirar el último y próximo partido, ganar al Benidorm y que el Altea, porqué no, gané al actual líder.

Confianza ciega en vosotros mismos, podéis y lo sabéis... ¡¡ánimo y a por todas!!


... Me gustaría seguir este artículo con vuestras opiniones, ¿por qué váis a darlo todo en el último partido? ¿por qué habéis estado líderes más de 3/4 de temporada?... Va animaros, dejad comentarios (padres y aficionados incluidos) y haber que sale de todo esto.